Prada se embarca en la joyería

Prada completa su oferta lanzando una línea de joyería. La marca de lujo, que siempre ha propuesto bisutería, sube de categoría con su primera colección de joyas de oro fino. Esta última, dirigida por la directora artística Miuccia Prada, que creó el proyecto, será comercializada a partir del mes de mayo en una selección de tiendas propias y en la e-shop de la marca.

“La colección de bisutería funciona muy bien. Pero había una demanda cada vez mayor de una verdadera línea de joyería”, nos explica la casa, que sigue la evolución actual de las principales marcas de lujo que tienden a diversificar su universo aún más, proponiendo sus propias colecciones de joyas con un posicionamiento de alta gama. Como Gucci o Giorgio Armani, que lanzaron este año su línea de joyería fina.

Esta nueva actividad es administrada completamente de forma interna por un equipo creado para dirigir este proyecto. Prada destaca en un comunicado de prensa el importante trabajo técnico realizado durante el proceso de producción, con joyas “hechas de oro y diamantes de 18 quilates, de proveedores certificados por el Consejo de Joyería Responsable (RJC), una organización sin ánimo de lucro fundada en 2015 para promover las prácticas responsables en el manejo de metales y piedras preciosas, desde su extracción hasta la venta”.

La colección, que consta de aretes, pulseras, colgantes y collares, ofrece un diseño limpio y sencillo, que se distingue por su toque irónico. La línea recoge, de hecho, algunos de los motivos lúdicos que han esmaltado las colecciones de ropa y accesorios de Prada en los últimos años, como plátanos, guitarras, rosas, conejos y robots. Sin olvidar el logo triangular de la marca, también mostrado en algunas joyas.

Las piezas se venden desde 580 euros, el precio de una pulsera, por ejemplo, hasta 4 000 euros y se proponen muchos collares alrededor de 2000 euros.

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