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Maria Grazia Chiuri encuentra un espacio seguro junto a su familia para crear en Roma
En un momento de confinamiento obligatorio debido al Covid-19, Maria Grazia Chiuri, directora creativa de Christian Dior, ha estado haciendo las cosas muy a la manera italiana. Se refugió con su familia en Roma. Específicamente con su hija Rachele Regini, quien es asesora cultural en el departamento creativo de Dior.
"Estoy con mi hija Rachele; estamos aislados en nuestra casa familiar en Roma. Estamos viviendo todos juntos esta crisis, así que creo que es muy importante mantener la calma y refugiarnos en nuestra creatividad. Soy muy afortunado de poder decir que estoy bien, y que mi familia y amigos también lo están", explicó Chiuri.
"Estar sana y poder estar en casa es un privilegio, así que tenemos que recordar lo afortunados que somos", añadió la diseñadora italiana en un intercambio con FashionNetwork.com desde Italia.
Tanto ella como Regini comparten ahora un apartamento en el centro histórico de la capital italiana, encaramado en lo alto de los campanarios y cúpulas de Roma, y con vistas a un jardín de naranjos donde las monjas de clausura caminan y meditan.
Chiuri siempre ha sido una creadora que trabaja estrechamente con su equipo y su taller. Alguien que sabe lo que significa subir de rango. Después de estudiar en el Istituto Europeo di Design en Roma, se unió a Fendi en 1989, convirtiéndose en la responsable de muchos de los accesorios de éxito de la casa. En 1999, se unió a Valentino y terminó a cargo de la dirección creativa de Red Valentino, junto con su socio de diseño Pierpaolo Piccioli. Una década más tarde, ella y Pierpaolo asumieron la dirección de toda la casa Valentino, antes de ser nominada para uno de los más prestigiosos trabajos de la moda: modista y directora creativa de las colecciones femeninas de Christian Dior, en 2016. La primera mujer diseñadora de Dior, siguiendo los pasos de leyendas como Yves Saint Laurent, John Galliano, Gianfranco Ferré y, por supuesto, el propio gran Monsieur Dior.
Desde su llegada a Dior, Chiuri ha inyectado un punto de vista feminista bienvenido; al mismo tiempo que ha logrado crear, en la actualidad, un estilo despreocupado pero valientemente elegante. Ahora, para una diseñadora tan práctica, la distancia de su equipo le ha obligado a idear nuevos métodos para mantenerse conectada para trabajar.
"La tecnología nos ayuda a mantenernos en contacto, como tener reuniones a través de FaceTime y trabajar por teléfono a diario. El personal del atelier de París trabaja desde casa y me envían actualizaciones de fotos o videos de los trabajos en curso. Por supuesto, a veces es un desafío porque encuentro que las mejores ideas a menudo provienen de conversaciones y de personas que están en la misma habitación, pero creo que todos tenemos que adaptarnos a esta situación temporal. Mi equipo está bien, y creo que el hecho de estar en casa ha despertado aún más su creatividad. Hablo con ellos regularmente, y siento que hay una sensación de energía aún mayor que antes. La creatividad es un espacio seguro en el que puedes refugiarte del mundo real, así que ahora es aún más especial", opinó Maria Grazia.
Aunque Chiuri nació en Roma, la madre de Maria Grazia es de Salento, en Puglia, la región que constituye el tacón de la bota que dibuja el territorio italiano. Ningún país ha sufrido más del virus que Italia, con más de 16 500 muertes por Covid-19, según la Universidad Johns Hopkins.
"Es imposible no ser afectada por la situación. Por supuesto, estoy profundamente triste por lo que está pasando. Me enorgullece ver tantas marcas de moda italiana, así como Dior por supuesto, produciendo máscaras y desinfectantes para hospitales. Trabajamos en estrecha colaboración con tantas fábricas en Italia que mi prioridad es apoyarlas y seguir apoyándolas una vez que la crisis haya finalizado", explicó la modista.
A diferencia de muchas personas en la moda, ella no está hiperconectada con su comunidad en medios sociales, por lo que ve este tiempo como un momento de reflexión y respeta el espacio de la gente, tanto física como virtualmente durante el encierro.
"Lo uso (los medios sociales) esporádicamente, pero no tanto. Estoy bastante ocupada con el trabajo y pasando tiempo con mi familia. ¡Al final no soy una persona muy digital!", manifestó.
El último desfile de Chiuri para Dior fue montado dentro de una carpa en los jardines de las Tullerías a finales de febrero durante la Semana de la Moda de París. Una brillante exhibición, titulada Rivolta Femminile, donde la inspiración fue la propia rebelión de Chiuri contra las normas burguesas y los códigos de vestimenta en su juventud en la Ciudad Eterna. Escenificada bajo gigantescos letreros de neón diseñados por el colectivo de Claire Fontaine, se podía leer: “Las mujeres son la luna que mueve las mareas”, o “Cuando las mujeres golpean el mundo se detiene”.
Con el beneficio de la retrospectiva y la apreciación de cuán vital es el distanciamiento social para romper la marea de Covid-19, es notable que casi 2000 personas nos presentamos a ese desfile, prácticamente frotándonos los hombros mientras nos sentábamos en las gradas dentro de la carpa.
Mirando hacia atrás, María Grazia reconoce que se dio cuenta muy pronto de la gravedad de la pandemia.
"Comprendí la gravedad de esta crisis inmediatamente cuando empezaron las noticias sobre China. Recuerdo que fue justo antes del último espectáculo de otoño-invierno. Estaba trabajando muy duro pero mi mente seguía volviendo a pensar en lo que se estaba desarrollando", recuerda.
Desde entonces, Dior ha cancelado el desfile Crucero que tenía previsto realizar en la Puglia natal de la madre de Chiuri, programado para principios de mayo. Además, las autoridades francesas de la moda también han cancelado la próxima temporada de Alta Costura, que tradicionalmente se celebra a principios de julio. Lo que significa que el próximo desfile de Chiuri para Dior no será hasta finales de septiembre, con la temporada de prêt-à-porter de la primavera de 2021 en París.
Ahora, después de semanas de confinamiento y reflexión, ¿cree que cambiarán las viejas formas de escenificar las temporadas de moda con todos los viajes obligatorios?
"No creo que nadie pueda decirlo ahora mismo. Creo que el mundo entero tendrá que adaptarse a las nuevas rutinas, y la moda también tendrá que hacerlo, al menos durante algún tiempo. Es muy difícil predecir cómo cambiarán las cosas en el futuro. Me estoy centrando principalmente en el presente, tomando las cosas día a día y buscando refugio en mi creatividad. No creo que sea prudente salirse de su camino para tratar de predecir el futuro, simplemente creo que habrá algunos ajustes que hacer y que tenemos que estar listos para aceptar estos cambios", concluyó.
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